En general, solemos ser más objetivos, tenemos más templanza, sufrimos menos estrés. Pero también prestamos menos atención a las emociones. Las reprimimos. Podemos parecer distantes o carentes de empatía. A veces demasiado duros y también menos creativos. Y necesitamos siempre una justificación empírica... ¡qué os voy a contar!
Como me gustan muchas de las cosas positiva de ser así no tengo intención de cambiarme de bando pero si que me gustaría ir limando mis aristas emocionales poco a poco. O ir entendiendo por qué es bueno limarlas ya que, al fin y al cabo, es la única forma en la que nosotros, los petardos-racionales, podemos cambiar nuestros hábitos.
Todo esto viene

Cuando le contaba esto a nuestros queridos amigos Janice y Asher, este último, que es de los míos (y como tú Jaime, que no te escapas) escuchó atentamente lo que le narraba y, refiriéndose a esa parálisis mental, dijo: "Tiene sentido". Y yo pensé, ¿a que sí?. Tiene todo el sentido del mundo... y días después me di cuenta de que ese es nuestro principal problema: ¡¡que todo debe tener sentido!!. Que no somos capaces de entender que a veces tiene sentido lo que no tiene sentido.
Y en esas ando yo. Intentando luchar contra mí mismo. Tarea de titanes porque es contra mi propio subconsciente... Por ejemplo. el otro día se fue Diana de vuelta a Rusia. Y en el aeropuerto volvió Jaione a ser más rápida. Empezó a llorar y no pude ser yo el primero. Sin embargo, di un primer paso... pequeñito ...sentí pena y ganas de llorar mientras Jaione lo hacía... pero ahí me quedé. Ni una lágrima... :S
Bueno, poco a poco. Es un primer paso. El segundo es éste: hacerlo público. Creo que me ayudará en el futuro. Tiene sentido ¿no? :)
PD: las imágenes están sacadas de aquí y aquí