viernes, 24 de diciembre de 2010

¿Santa o Grinch?

Normalmente me describo como un ser cero-navideño. Es una forma rápida de explicar que no comparto lo que mucha gente entiende por "gustar la navidad". No me gusta el sentimiento de tenerqueregalar, no me gusta ir de compras, no soy cristiano, no me gusta la decoración (en general y en particular)... Cada cual que la viva como quiera/pueda, pero no me siento identificado con todas esas cosas representativas de la Navidad.

Eso no quiere decir que no me haga ilusión que llegue la Navidad. Obviamente, por las vacaciones :). Pero sobre todo porque trae cosas que si me llenan. Por ejemplo, el juntar a (casi) toda la familia alrededor de una mesa, olvidarnos del día a día y compartir penas y alegrías. Eso me gusta. Y me parecer genial tener la Navidad como excusa para, por lo menos, hacerlo una vez al año. También me gusta que el que lleguen estas fiestas nos "obligue" a acordarnos de todos a los que queremos, estén en China o en la puerta de al lado. Una sola postal o un e-mail de una línea te hace una ilusión enorme.

Con niños aparecen nuevas sensaciones. Ahora con Diana me encanta que viva la ilusión de saber que hay alguien extraño (sea Reyes Magos, Olentzero, Papa Noel, Ded Moroz o lo que sea) que sin conocerle le va a traer un regalo sorpresa. Aunque tampoco quiero enrollarme, lo que quiero decir es que disfruto de lo esencial. Y eso normalmente suelen ser sentimientos. Y esos sentimientos pueden aparecer con muy poquitas cosas materiales. O, al menos, así es como me gusta vivirlo a mí. Y como muestra, un botón: El mini-arbol de Navidad de Diana con lucecitas que le encantan y un cartelito donde acaba de aprender a escribir su nombre. Ver esto es lo que hace que me guste la Navidad. Aunque eso sí, a mi manera.

¡Feliz Navidad, chicos! En la forma, tamaño o color que os guste pero que la disfrutéis. Que seais un poco más felices y que celebremos muchas muchas más :)

domingo, 12 de diciembre de 2010

Las guerras de hoy en día

Hace unos años nos hablaban de cómo había cambiado el concepto de guerra: de una convencional con ejércitos enfrentándose a otra de terrorismo puntual. Así lo hemos visto dentro de países occidentales en el 11-S o el 11-M y también en guerras en países como Irak o Afganistán.

Sin embargo, un nuevo tipo de guerra parece que está llegando. No tiene porque tener muertos pero sí puede arruinar la imagen de un país, hacerlos muchos más pobres o romper puentes con otros países. Así, el mayor enemigo de EEUU ahora mismo no es Bin Laden, ni Irak, ni Irán, ni Al Qaeda. El mayor enemigo ahora es un tipo extraño e irreverente pero descarado y con principios llamado Julian Assange. No solo ha hundido la imagen de EEUU como eje del Bien, si es que alguien se creía eso, sino que le ha granjeado malas relaciones con otros países. Y lo que falta por escuchar. Además, toda la limpieza de imagen que supuso la llegada de Obama para la opinión pública fuera de EEUU se ha ido al traste con las filtraciones. Nos vuelve a quedar claro que si hay que presionar a jueces, se presiona; si hay que espiar a la ONU, se espía; si hay que si hay que ocultar asesinatos y evitar hacer justicia con sus responsables, se hace. Todo por el bien común, la democracia y la justicia universal.... perdón, por el bien propio, la impunidad, la injusticia y el dinero de sus empresas...

También el "mercado" decide que Irlanda tiene que pagar. Y se acepta un crédito exterior que obliga a rebajar drásticamente las condiciones de vida de los irlandeses. "Mercado" suena bien: algo externo, hetéreo, que no está claro como funciona. Sin embargo, son personas individuales apostando a qué país va a caer, cuál debe machacar a sus ciudadanos con la intención de.... ganar dinero... si al menos, fuesen ONGs que ejercen de robinhoods....

Desde la llegada de Obama también se hizo un esfuerzo por acercarse a los países islámicos y a la inmensa mayoría moderada de su población. Sin embargo, en cuestión de días un pastor desconocido propone quemar coranes en el aniversario del 11-S y dinamita todo acercamiento.

Al final, parece que ninguna guerra volverá a ser igual. Que cada vez es más importante la acción individual. Para lo bueno y para lo malo. Gandhi lo tendría mucho más fácil hoy día. pero también Hitler.

Parece que cada vez es más importante la transparencia, la ética porque cada vez es más importante nuestra opinión... Si tenemos toda la información que queremos y la capacidad para ejercer nuestro poder sobre empresas, gobiernos, líderes, ¿por qué no utilizarlo para hacer un mundo mejor? Al fin y al cabo, unos pocos se encargarán de aprovecharlo para cargárselo...

Necesitamos Assanges. No necesitamos pastoresquemacoranes. Necesitamos consumidores responsables. No necesitamos consumidores que solo se ven su ombligo. Necesitamos personas como tú o como yo que hagan lo que puedan, que intenten ser consecuentes, que luchen (sin armas),.... ¿a qué ejército te quieres unir?