viernes, 7 de diciembre de 2012

Y nos dieron las diez...

Solo llevamos 1 mes como bi-padres y ya el hecho de que Diana pase una noche con una amiga nos parece casi como si estuviésemos de luna de miel. Pero luego te chocas con la realidad. Primero, tiras la casa por la ventana, y con la cosa como está, te gastas el sueldo en un menú para dos por 13,50 eurazos. Pero cuando llamas para reservar los tíos ratas dicen que NO, que se han equivocado al poner las fechas y que es a partir del fin de semana que viene. Vaya, es que ya no tengo solo una niña en casa...

Sigues con tu plan de darlo todo, vas al... Juantxo!!!... Pero no hay sitio para el carrito.... encontramos otro en el que comemos a gusto. Nos crecemos... Y entonces, decidimos que vamos a darnos un homenaje en el Etxeberria con una buena cervecita de importación. Llegamos. No hay sitio (menos con niña pequeña) pero como nos sentimos eufóricos (noche libre!!! solo con una peque!!!) decidimos pedir y tomar la cervecita en la calle... En ese momento empieza a jarrear y asumes que tampoco se está tan mal en casa...

Para ver la parte buena, vamos pensando en el pelotazo que nos vamos a preparar en casa. Pero June decide que esos vasos que ella no puede tocar son DEMASIADO atractivos. Durante una hora no tengo claro si hemos hablado de algo.


Y entonces, solo entonces, lo asumes. Pero para que no parezca una derrota te autoconvences: No se está tan mal en casa durmiéndote prontito; disfrutando de la pequeña que ahora tiene menos atenciones; qué bien en casa tranquilo; puedo estar en el ordenador; podemos habl.... ¿Jaione? ¿Jaione?... Bueno, eso... que se está muy bien acostándose pronto


viernes, 25 de mayo de 2012

ChiquitRina, las penas vienen y van

Dicen que los enamorados sienten que todas las canciones están escritas para ellos. A mi el enamoramiento me queda lejos, pero en éstas últimas 24 horas he escuchado más canciones supuestamente dedicadas a Diana que en los últimos 2 meses. Es lo que tiene que ya sepamos que en Junio no vamos a hacer el segundo viaje a Rusia y habrá que esperar a después del verano...

Ya. Ya sé que cuando hablan de separación, de corazones rotos, de lágrimas o de amor no se refieren a un padre separado de su hija. Ni siquiera en la de "Mi lamento" de Dani Martín, que resulta que es a su hermana que falleció hace poco. Pero ahí me tenéis en un coche yo solo con la radio a tope y en plan sentimentaloide.

Muchas son las que me vienen a la cabeza sin necesidad de sintonizar em transistor. Pero hoy me voy a despedir dejando una canción (ñoña, para que vamos a engañarnos) de ABBA. El honor le debería corresponder a Mamma Mia, pero es que hoy cuando tenía la guardia baja me han rematado con Chiquitita. Y uno es humano. Y le viene bien pensar que las penas vienen y van. Y, sobre todo, que desaparecen:

sábado, 12 de mayo de 2012

¿Nos están estafando?

Hay quien piensa que las protestas como las del día de hoy son una pataleta de un niño de papá. Ese que se queja por nada y que no entiende que todas estas medidas son las que HAY que tomar. Yo no voy a entrar en el debate de si esta enésima reforma financiera es la correcta o de si es obligatorio recortar esa cantidad y de dónde se recorta. De si la nacionalización o el banco malo light es lo único que nos puede salvar. Ya habrá tiempo para ese debate. Lo que quiero hoy es que los árboles no nos impidan ver el bosque...

Si hiciésemos un balance de estos años de crisis (con gobiernos de un lado y de otro y en distintos países) veríamos como se ha prestado y regalado dinero a porrillos a entidades financieras, se nos han impuesto menos derechos a los trabajadores, hemos empeorado nuestra calidad de vida con un peor sistema educativo y de salud, se han reducido nuestros salarios (ya seamos pensionistas, funcionarios, trabajadores de la empresa privada),... Bueno, pero es que.... ¡una crisis supone sacrificios!

El problema aparece cuándo miramos qué hemos ganado con esta crisis como ciudadanos. Ni la vimos venir, colaboramos con ella y nos pegó un sopapo de golpe. Parece justo que también paguemos por estar en el ajo pero que a cambio consigamos un mundo más justo, mejor. La respuesta es triste: básicamente, no ha valido para NADA positivo. No se han puesto los medios para que no vuelva a ocurrir algo parecido, ya que, por ejemplo, se está incubando la burbuja alimenticia; No ha pagado nadie, no hay culpables, ni banqueros, ni agentes públicos,.... nadie.... ni por la burbuja financiera, ni por la inmobiliaria.... nadie...; no se ha llegado a imponer la tasa sobre transacciones financieras para recuperar parte del dinero que hemos tenido que poner en los bancos; no estamos haciendo verdaderos esfuerzos por frenar el cambio climático; no se han incluido criterios éticos, sociales y/o medioambientales en la toma de decisiones, en la compra pública; no hay más gobernabilidad global (exceptuando la de "los mercados", claro); no se han controlado los mercados, la especulación, el dinero rápido, las posiciones a corto; somos menos ricos pero no para aliviar la situación de los más pobres sino para que el 1% megamultimillonario sea todavía más odiosamente rico; los políticos siguen con estupendas condiciones laborales; tenemos ex-presidentes cobrando porque sí mientras luego tienen sueldos de 5 ceros en empresas sobre las que antes regulaban; no hablo de la Casa Real; ni tampoco del Senado; .... en definitiva, poca cosa hemos conseguido para tener un mundo mejor.... bueno, sí, España ganó la Eurocopa y el Mundial #modoIroniaON

Y, entonces, ¿puede alguien explicarme por qué no debería sentirme estafado?

viernes, 4 de mayo de 2012

Necesitamos que lo eco sea cool

Cambiamos. Sí, chicos, aunque todos ladeemos la cabeza y pensemos que no podemos, lo hacemos. Y cuando llega el cambio queremos que todo el mundo gire a nuestro alrededor. En ese momento nuestra verdad se convierte en universal y nos indignamos con los que nos rodean. ¿O es que hace 5 años no debíamos indignarnos por lo que nos levantamos desde hace casi un año?

Así ha sido en lo que respecta al Medio Ambiente. Desde los hippies de los 70, pasando por distintas variantes llegamos a un punto en el que lo medioambiental empieza a tocar a las masas. Ha dejado de ser algo marginal para transformar a toda la sociedad. Pero, ¿no es eso lo que queríamos?

 En parte. Queremos además que lo haga con nuestra verdad inviolable, con lo que tenemos AHORA MISMO en la cabeza. Y no hay negociación. Es por eso que consideramos que pervertimos el concepto si otros adoptan versiones light de lo eco. Por lo que nos olvidamo completamente como hemos llegado nosotros hasta aquí, pervirtiéndonos poquito tras poquito. Y negamos a los demás que puedan seguir un camino gradual. No aceptamos que tienen derecho a pensar diferente, aunque no nos guste. Y, sí, nosotros hemos hecho lo mismo antes.

Por eso mi deseo inicial: que lo eco sea cool. Necesitamos que lo perroflaútico medioambiental permee en toda la sociedad. Que no quede en unos cuantos puristas que se juntan en medio del bosque para golpearse en el pecho.

Necesitamos que Zara o Bershka o quien sea venda camisetas en las que quede guay reciclar. Necesitamos que en todas las ciudades pase como en San Sebastián: que solo seas super-molón si vas en bici; y si es vieja y reutilizada ya es que lo rompes. Necesitamos restaurantes eco que sean chic (como el de Bilbao de la foto). Necesitamos vídeos de youtube, dibujitos, canciones pegadizas,... Necesitamos que todos y cada uno de nosotros encuentre una razón para cambiar sus hábitos. Los habrá más puros o más frívolos pero... ¿se trata esto de ponerse una medalla o de transformar el mundo en que vivimos?

When you buy, buy baby....

domingo, 29 de abril de 2012

Empatía

Duras vidas las que hemos visto en Rusia. No solo por los niños que viven en orfanatos sino, sobre todo, por la de la gente normal. La que sufre y no se queja. La que llora y no sale en los periódicos. Lo primero que me vino a la cabeza fue: ¿España en crisis? Seguro que no para todos los que dicen estar en crisis. Podemos hacer cosas tan simples como viajar, aunque sea a un pueblo a 1 hora de distancia. Tenemos calefacción todo el año, calles hasta demasiado decoradas... Tenemos tantas cosas que resulta casi un insulto que muchos de nosotros digamos que estamos en crisis. Al fin y al cabo casi todos los que leemos estas líneas, vivimos bien sin haber hecho nada para merecerlo. Solo nacer en un sitio determinado, en una familiia determinada y no cagarla en el camino.

Empatía, ese bien tan escaso y tan difícil de conseguir. Bueno, sí, todos creemos ser empáticos. Con suerte con el que tenemos delante. Pero se nos nublan las ideas según se aleja nuestro objetivo. Así, podemos decir burradas como "Mucha gente ha cogido una patera porque en España tenía asistencia sanitaria".

Mucho camino por recorrer... yo mientras me uno a la iniciativa de Bill Dryton de llevar la empatía a los colegios (¡y a los hogares!) y añado otra idea: Erasmus de empatía obligatorio para todos los ciudadanos. Dicen que irse fuera ayuda a que los jóvenes sepamos desenvolvernos por nosotros mismos, aunque no siempre se consigue. Pero igual ha llegado el momento de obligarnos a irnos de cooperantes, a ayudar día sí día también en la residencia de ancianos de la vuelta de la esquina, o en el centro de drogodependientes,... quizá así no solo aprendamos qué es el sufrimiento humano sino que lo sentiremos en todas nuestras decisiones.

Y aquí llego a la política. Pensaba que las diferencias entre la izquierda y la derecha eran solo en papel pero me han bastado estos últimos meses para comprender que lo distintivo es la empatía por el sufrimiento humano. Subrayo humano. No quiero decir qué los partidos de izquierda sean increíblemente empáticos y buenas personas sino que las teorías, esas que se convierten en prácticas, se basan en una falta de empatía hacia los sectores más perjudicados.

Así entendemos que las nuevas medidas en salud son solo 4 cafés, o un pequeño esfuerzo. Que las de educación no repercuten en la calidad. No, claro, el listo seguirá sacando buenas notas. Y como tiene una familia estable y con dinero, irá a una universidad de pago. Y luego el padre le enchufará dará una oportunidad en una gran empresa. Y si tiene un problema de salud pagará tranquilamente un 50% de sus recetas, porque es un 0,0005% de su sueldo. Mientras el que ha tenido la mala suerte de nacer en el sitio equivocado tendrá que superar la barrera de una educación emocional escasa, de unos apoyos insuficientes, de que nadie le echará una mano en lo profesional y, encima ahora, resulta que no se esfuerza lo suficiente, que no permite a otros alumnos tener expedientes brillantes. ¡Qué me lo digan cuando el resto tenga que superar las mismas barreras! Y por la salud... ¡la gente no sufre por unos euros!

Ya lo advertía Obama en su libro y le ha pasado a él también. La carrera de la política fomenta el distanciamiento con el sufrimiento humano. Por lo tanto, requiere un esfuerzo extra. Requiere no solo saber que la gente sufre- que eso lo saben todos- sino sentir lo que el otro siente. Requiere comprender que lo que tenemos, lo tenemos casi por accidente y que nuestra felicidad reside también en los demás. 

Ya... lo sé.... malos tiempos para la lírica...

PD: perdón por el retraso en escribir y por hacer este post tan denso... quería contar demasiadas cosas y, lo peor, es que he estado quitando temas...